miércoles, 30 de noviembre de 2016

Philo Farnsworth (El niño de 14 años) Inventor de la televisión TV




Philo T. Farnsworth nació el 19 de agosto de 1906 en Indian Springs, Utah, hijo de Lewis Edwin y Serena Bastian Farnsworth, pertenecientes a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Philo, que había nacido en una cabaña de madera, no conoció la electricidad hasta la primavera de 1919, cuando su familia se mudó a Rigby (Idaho), donde trabajaron como medieros.
El joven Philo desarrolló un interés temprano por la electrónica después de su primera conversación telefónica y el descubrimiento de una serie de revistas científicas en el desván de la nueva casa de la familia en Rigby. Con estas revistas y libros de ciencia prestados aprendió Física por su cuenta, estudiando las teorías de Einstein, al tiempo que se dedicaba a reparar y construir dispositivos eléctricos con piezas encontradas por la granja.






Todo lo que Farnsworth conocía hasta la edad de once años sobre la electricidad estaba únicamente basada en todo lo que había leído en distintos libros. Con acceso a la electricidad, comenzó a trastear con la chatarra de motores que encontró abandonados en la granja de sus padres, con los que fue capaz en poco tiempo de reparar la lavadora de sus padres poniéndola un nuevo motor.

En la adolescencia montó su primer pequeño negocio como reparador de radios, mientras gastaba el resto de su tiempo libre autoformándose en las teorías científicas más innovadoras. Con libros de ciencia prestados aprendió mucho sobre las nuevas teorías sobre la estructura de la materia y con distintas revistas consiguió mantenerse al día de los últimos avances científicos.

Precisamente en una de esas revisas prestadas un día leyó un artículo que especulaba sobre la posibilidad de encontrar en un futuro próximo un híbrido entre el cine y la radio, que sería capaz de llevar a todos los hogares del mundo imágenes y sonido en tiempo real. Aquel artículo le abrió una puerta hasta entonces cerrada donde encontró cómo a lo largo de los últimos cincuenta años habían sido muchos los que habían intentado aproximarse a este invento, tales como George Carey, Paul Nipkow, Karl Ferdinand Braun o A. A. Campbell Swinton.

Pero a medida que Farnsworth leía, más se daba cuenta de que la aproximación a la solución del problema planteada por la gran mayoría de los científicos e inventores no era la correcta. Todos ellos buscaban la solución al problema en una televisión mecánica, algo que Farnsworth supuso que no sería posible. Las aproximaciones más innovadoras que aparecían en artículos redactados por todos los que buscaban la retransmisión en directo de imágenes se basaban en discos giratorios a través de los cuales se pretendía transformar la luz en electricidad. Ante este escenario, los discos habrían de girar a una velocidad inalcanzable para poder conseguir una imagen que fuera más allá de sombras irreconocibles.

En aquel momento, Farnsworth ya tenía un problema concreto en mente: encontrar un sistema de transmisión capaz de funcionar a la misma velocidad que la luz. Posiblemente muchos otros llegaron a plantear este mismo problema, pero ningún otro fue capaz de encontrar una solución antes que Farnsworth, el que lo hizo con tan sólo 14 años.

Mientras recorría con la cosechadora los campos de cultivo de la granja de sus padres, para matar el aburrimiento, Farnsworth divagaba sobre el problema de la televisión. A medida que Farnsworth cosechaba línea a línea los campos de patata, una de las ideas que revolucionó el siglo XX le vino a la cabeza: Barrer la imagen sobre un haz de electrones que se desviaría magnéticamente EN LINEAS de arriba abajo (La televisión analógica tenía 625 líneas).



Con el traslado de su familia de vuelta a Utah, Farnsworth tomó con tan sólo 15 años un examen con el que se le presentó la oportunidad de entrar en la Universidad de Brigham Young, encontrando así la primera oportunidad de empezar a desarrollar más a fondo su particular prototipo de televisión. Pero la suerte no estaba de parte de Farnsworth, y a los pocos meses de entrar en la universidad, su padre fallecía, razón por la cual tuvo que abandonar la universidad y buscar un trabajo para mantener al resto de su familia.

Durante tres largos años vio como su proyecto quedaba relegado al olvido a causa de las nuevas necesidades familiares, incluso se vio tentado a vender su gran idea, por la cual llegó a estimar que le pagarían hasta 100 dólares. Su cuñado Cliff Gardner le convenció de que no lo hiciera, y una vez que la situación económica mejoró una nueva oportunidad se le presentó.


Leer más: http://recuerdosdepandora.com/historia/inventos/la-historia-de-philo-farnsworth-el-inventor-de-la-television/#ixzz4RTcop5uE



Elma (Pem) Gardner Farnsworth, esposa de Philo

 



Aquel día Everson y Pem (la mujer de Farnsworth) se pusieron frente al receptor de televisión. En otra instancia, Farnsworth pintó un cristal de negro y lo atravesó por una línea blanca. Entonces puso el mecanismo en funcionamiento, y tanto Pem como Everson observaron cómo la línea blanca aparecía en el receptor. Hasta entonces nada demostraba que aquello estuviera funcionando, pero fue entonces Farnsworth giró el objeto que estaba siendo transmitido y los primeros espectadores de una televisión electrónica pudieron ver cómo la línea blanca giró en vivo y en directo.














No hay comentarios:

Publicar un comentario

RADIOACTIVIDAD

RADIOACTIVIDAD NATURAL NORM (Naturally Ocurring Radioactive Materials)  Un Riesgo a tener en cuenta en los trabajos de las Industrias petrol...